Dicen que eres callejero porque vagas por las calles, en busca de tu sustento sin hacerle daño a nadie.

Yo te prefiero sin nombre, sin familia y sin collar.

Un gato como es debido, un gato, punto final.

Con la energía divina del que se sabe inmortal, con el aura definida, curandero sideral.

Eres el rey de la noche, el ronroneo sin fin, sin hacer ningún reproche, me sanas mi chiquitín.

Cada cual tiene su arte, cada uno su perfil, no te pareces a nadie, eres único, eres feliz.

Eres mi gato amoroso que siempre conmigo está, he tenido muchos gatos y no sé a cual quiero más.

Sois felinos, misteriosos y venís del más allá para decirnos vanidosos que no sabemos de la misma la mitad.

Seguid mostrando el camino del amor incondicional que no necesita dueño, ni correas para pasear.

La libertad es vuestro sino y no obedeceis a nadie.

¡Sois tan bellos mis mininos, gracias por ser tan formidables!