Coge un diente de león, un poco de zanahoria, un cogollo de alcachofa, apio, tomate y cebolla.
Añades un rabanito de esos rojos y chiquitos, lo cortas más bien finito y le añades un buen apio y un perejil bien bonito.
No te olvides la lechuga, fresca, dulce y suavecita, la lavas bien con agüita de la mejor selección, que no pierda su sabor y a la vez quede limpita.
Y para el aliño rico reserva un rico limón, aceite virgen muy extra que cuide tu corazón.
Un trocito de cilantro y algunas pasas de uva, semillas de calabaza y nueces ricas y aceitunas.
Con esta combinación llegarás a los 100 años, respetando tu equilibrio y el de los animalitos sabios.