Hay horas en que cuesta no tirar la toalla.
Hay días en que preferirías no haber despertado.
Hay minutos en que la distopía lo invade todo y cuesta ver la luz.
Hay momentos en que desearías estar ya en la otra dimensión.
Hay veces en que preferirías no tener mente ni pensamiento.
Hay, hay, hay tanto amor por repartir, por regalar, por compartir…que sigo remando hacia mi misma y bendigo mi camino.