Te pincharán veinte veces pero no estarán seguros de que sea muy seguro pincharte otras tantas veces.
De igual forma compañero, no te despistes ni un pelo, no vaya a ser que el tendero que no se quiere pinchar, hoy te vaya a contagiar sin mover ni un sólo dedo.
Has de ser bien obediente, no te hagas el valiente, este bicho se camufla entre los dientes.
Camina bien tapadito aunque estés bien pinchadito puedes irte al otro barrio sin pasar por el sanitario
Es el delirio total, hoy te pinchan a destajo aunque no sirva un carajo, aunque a veces sea mortal.
Conviene tener al pueblo bastante muerto de miedo, así todos obedecen las innumerables sandeces que se inventa cada día la autoridad incompetente.
Esos sabios contratados, médicos comprados, esos que miran hacia otro lado y les importa un bledo, si pinchan a un niño o a un muerto.
Es el delirio total, se han pasado veinte pueblos.
Están bastante fatal, pero se les acaba el invento.
Cada día somos más los que no nos tragamos el cuento.
Somos libres compañeros, abandonad las mazmorras.
Se les acabó la historia de los malos y los buenos.
Deja de sembrar terror, mi oscuro hermano perdido siempre serás bienvenido a nuestro mundo de amor