Os damos las gracias, almas viajeras que escogistéis vivir y morir en estos convulsos tiempos para el bien mayor.
Queridos abuelos.
Abuelos queridos y añorados sois bendecidos y honrados. Vuestros sacrificio no ha sido en vano. La Luz Ha Ganado. Y vosotros habéis abierto el portal. Habéis dejado este plano en soledad y silencio, os habéis ido sin hacer ruido, sin quejaros. Os habéis inmolado en aras de una pandemia inventada que os ha sacrificado.
Pero sois bendecidos hermanos, abuelos añorados, nos habéis amado incondicionalmente y nos dais la mano desde el lugar ignoto que hoy os recibe y os abraza desde el otro plano.
Os amamos abuelos, os amamos y os honramos e incluso perdonamos a las almas ilusas que os abandonaron.
Os amamos abuelos, os amamos y honramos y os damos hoy las gracias por haber sido el puente hacia la Luz, que hoy ya ha ganado.