Un guerrero de la Luz es aquel que viaja hacia las profundidades de sí mismo para encontrarse con la esencia y el origen primigenio. El acto infinito de Amor de la Diosa y el Dios que viven dentro de tí y que se expanden a través de la galaxia hacia lo infinito y eterno. Un guerrero carece de miedo, no porque sea valiente o esté lleno de venganza e ira, sino porque se conoce a sí mismo y conoce absolutamente todo su potencial. El miedo existe cuando no te conoces, cuando no conoces tus potenciales, cuando no eres consciente de tu fuerza. Por lo tanto, un Guerrero es consciente de su fuerza y sabe que no está ahí para llevarle a la lucha, está ahí para ayudarle a Ser y para ayudarle a adentrarse a través de las profundidades de todos los misterios.
«Un guerrero de la Luz es aquel que se mueve a través de la vida mediante una inocente autenticidad. No finge nada, es auténtico, es honesto, expandiendo la verdad infinita que encontró en las profundidades de su ser. Aquella verdad que le recuerda al mundo el instante eterno de la creación en Amor para que de esa manera, el mundo rompa las cadenas que le sujetan a la ignorancia y el dolor.
Los guerreros de la Luz no lucha. Viven y están en eterna Paz. Una paz que es inquebrantable y poderosa. Esa clase de Paz que por sí misma cura toda clase de guerra y conflicto. Aquellos que hacen la guerra, aquellos que viven en el conflicto, realmente tienen mucho miedo y no se conocen a sí mismos. Conocen únicamente el poder que surge de la dominación y la manipulación. De tal manera, todo conflicto, desde una gran guerra hasta una pequeña discusión doméstica, proviene de la ausencia de la Paz interior y de la falta de conocimiento de sí mismos. Cuando no te conoces y no conoces tu fuerza y tu potencial, fácilmente te pueden manipular. Por ti mismo entregas tu fuerza y entras en los juegos de la dominación. La Paz que surge del interior y del conocimiento de uno mismo, simple y sencillamente no entra en conflicto, pues no lo necesita, ya que carece de miedo. Eso, es un Guerrero de la Luz.