Una vez alguien me dijo que ella era La Luz y yo me lo creí.
La Luz no es exclusiva de nadie.
La Luz brilla dentro de cada uno de nosotros, muchas veces a pesar de nosotros mismos.
La Luz es generosa y se expande y se comparte y se derrama entre la oscuridad y la ilumina.
La Luz ilumina el camino de la pena y se desparrama entre tanta tristeza escondida y espera el momento para hacerse presente y brillar y reirse de tanto miedo en cuerpos de adultos infantiles.
La Luz erez tú y soy yo, cuando estoy en paz y emano amor y me sonrío y me mimo y me disfruto y me enamoro de tanta belleza, de tanta pachamama, de tanta humanidad huérfana que pide siempre más y más atención, más y más amor.
Somos Luz, amiga mía, ciertamente, somos Luz.

Genial. Estas dos frases:
«La Luz no es exclusiva de nadie.»
«La Luz erez tú y soy yo,» son espléndidas 😍😍😍😍
Me gustaMe gusta