Nos estamos dividiendo, separando por mitades, los que ya no tienen miedo y los que siguen el baile.
Y no puedes convencer de nada a nada ni a nadie. La certeza que tú tienes, no se contagia por el aire.
Cada cual tiene su vida, cada quién su mascarilla. No se la puedes quitar aunque les hagas cosquillas.
Sigue el camino que guía tu corazón sin mochilas, sin prescripciones baratas, sin miedos, ni pesadillas.
La certeza que yo tengo, hoy la comparto contigo que me escuchas cada día y haces conmigo el camino.
Lo que escuchas, lo que ves, lo que dicen y aconsejan… déjate ya de sandeces. Ciérrales todas las puertas. Nada de lo que te dicen es la verdad verdadera.
Activa tu pineal y conéctate a la Tierra.
Los pajaritos que cantan son más sabios que tu suegra.