No cuentan los días, no importan las horas, se ha parado el tiempo, empieza la aurora.
Es un nuevo tiempo, una nueva vida. Se descorre el velo, se activa la energía.
Somos los pioneros de la nueva era. Abrimos los brazos, te damos consuelo.
Y quizás somos pocos, pero nos bastamos, llevamos antorchas siempre a nuestro lado.
Venimos de lejos, surcando los cielos, vivimos mil vidas y cien mil deseos. Pero hoy ya sabemos cuál es la misión: despertar al mundo de tanto dolor.
Y no es muy osado, somos muy humildes, tenemos muchos sueños tiernos e infantiles.
Somos hadas, genios, enanitos, gnomos, somos muy pequeños y a la vez muy sabios.
Somos esas brujas de los viejos cuentos, hoy resucitadas, no tenemos miedo.
Somos los guerreros de este nuevo tiempo, llevamos el alma a pecho descubierto.
Para darte besos hasta el infinito y hacer este mundo más bueno y bonito.