Sacudiéndome los egos, mi otro yo comienza a andar.
Sorteando los misterios de mi mente, acariciándome el alma, creyendo en mi libertad.
Amiga de los misterios, hermana de la bondad, compañera de los hombres de buena voluntad.
Soy la estrella, soy el verso, soy la amiga más leal.
Soy la mujer sin pasado, yo soy esencia sin final.
Y no tengo compromiso más que con mi bienestar, con la salud, la abundancia, la vida en su totalidad.
No me vengas con carencias, todo lo quiero atesorar, no tengo benevolencia con el miedo y la maldad.
Yo soy esa eterna esencia, que ha sido, es y será.
Si quieres seguir mi estela, abre el pecho y no mires hacia atrás.