Madre Tierra que nos das los aromas de la paz. Lavanda para dormir y naranja para reír. Pachamama que regalas los perfumes más intensos, inciensos, mirras, y sándalo para el corazón despierto. Amalur, Gaia amorosa, nos despiertas con las rosas, y nos regalas romero y salvia con mucho esmero.
La Tierra tiene tesoros que debemos conservar y aprender a utilizarlos para poderlos amar.
Son aceites esenciales, las esencias de las flores, de los tallos, las cortezas, las raíces… Los olores de todas las maravillas que nuestra madre nos guarda, en el corazón de cada aceite esencial.
Gracias madre tierra amada, gracias porque con tu afán de toda la Pachamama hoy podemos disfrutar. Nos cuidas con tanto esmero, nos das amor y consuelo. Por eso madre querida te agradezco y te venero.
Que tu conciencia divina se expanda hasta el infinito nos alegre la vida por la tierra y por el cielo.