VASOS COMUNICANTES

Ni contigo ni sin ti, mi vida tiene remedio.

Como el agua y aceite somos ambos y mi empeño de sentirme diferente es en vano.

Somos distintos e iguales y esa es la gracia mi hermano.

Déjame volar y vuela, nos verenos en lo alto, no controles más mis penas y no haré de tí mi reina de bastos.

Eres tan distinta a mí y sin embargo…somos iguales pequeña, deja que te de la mano, para atravesar la puerta del eterno desamparo.

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