Si tienes casa y comida y también tienes salud, si puedes abrir los ojos y disfrutar si hace sol….Ser feliz es una opción.
Siempre puedes compararte con quien tenga algo mejor, según tus necesidades, tu prioridad deberías ser tú.
Aprender a disfrutarte, a ser amiga de ti, a cantarte y a bailarte y hacerte siempre feliz.
Mimarte cada mañana con un rico desayuno, agradecer por la suerte de que puedas tener uno.
Dar las gracias por el agua que te limpia cuando quieres, ser consciente de tu suerte, cuando hay seres que no tienen.
Cerrar entonces los ojos y notar que por tu boca puede salir ese aire con la preocupación que ya no toca.
Respirar toda la vida, con total autoconciencia. Estar vivo es un milagro. Disfruta de la experiencia.
Y saber lo que te gusta, y gustar de lo que tienes y darte entonces las gracias por ser del todo consciente.
Y regalarle a la vida la mejor de tus sonrisas y ser amable contigo igual que con tu vecina.
Saludar y dar las gracias, orar al salir el sol, hacer balance de noche, para saber si podrías haberlo hecho mejor.
Ser feliz no tiene precio, no se compra en internet, ser feliz es un camino, ser feliz es tu deber.
Y nadie puede ayudarte, ni enseñarte cómo es, si te atreves a arriesgarte, te puede salir muy bien.
Yo te animo a equivocarte, a acabar y a comenzar, a caer y a levantarte y volverlo a intentar.
Haz el esfuerzo, reacciona, sal de tu yo victimista, el ego que te acompañe es demasiado catastrofista.
Nadie vendrá a rescatarte, no existe el príncipe azul, tú eres dueña de tu vida y ser feliz es una opción.