Desde que veo de más y oigo con más oídos. Desde que miro tus ojos y los confundo con los míos.
Desde que entiendo mensajes encriptados en tus pasos y escucho más las rabietas y camino sin zapatos…
Desde que salgo a la calle y me siento acompañada por el aire que respiro y el sol que besa mi cara…
Desde que siento en mi cuerpo la humanidad que me acompaña…
Desde que escucho el silencio y la música que no tiene palabras…
Desde que cierro los ojos y se me llenan de lágrimas
Desde que siento mi pecho expandirse hasta tu casa y lloro tu sufrimiento y me alegro si se te pasa…
Desde que soy más sensible, más consciente, más humana, me muero de humanidad, y te bendigo mi hermana.
Bendigo nuestro camino y a ese niño que me acompaña.
Bendigo igual al anciano que espera abandonar su casa.
Bendigo al perro y al gato y te bendigo vecino.
Tenemos la misma madre, venimos del mismo sitio.
Me muero de humanidad y continuo el camino.
Te bendigo y me bendigo, honremos nuestro destino.