Échatelo todo a la espalda, relativízalo todo, no le des tanta importancia, vive sin tanto mal modo.
Que casi nada te altere, que nadie más te perturbe. Que sepas vivir la vida surfeando entre las nubes.
Porque nunca pasa nada, porque nada es importante. Porque al final todo pasa, porque somos impecables.
Porque aunque tengas problemas, todos ellos pasarán. No te lo tomes a pecho, respira y déjalo pasar…
No pienses, no le des vueltas, echa tu mente a volar y disfruta del momento. Nada importa al final…
Sin embargo, aquí y ahora, vas y vienes, vienes y vas. Desde el pasado al presente. Del futuro al más allá y tu estómago inocente no sabe por dónde va.
No digiere, se hace el loco, no se deja de quejar…
Poquito a poco mi amigo…al final lo lograrás y ese estómago divino por fin podrá descansar.